miércoles, 28 de febrero de 2007

El detalle que faltaba


Un guiño evidente a Martin Scorsese por parte de la Academia fue convocar a Francis Ford Coppola, George Lucas y Steven Spielberg para la entrega del premio al mejor director. Una vez Scorsese arriba del escenario, señaló la prensa, se produjo la reunión automática de los legendarios movie brats que reanimaron el cine estadounidense en los años 70.

A mí lo que más me llama la atención de las listas de invitados son los ausentes. Y en este Olimpo portátil de domingo por la noche faltaba la sota: Brian De Palma. es cierto, su carrera es tremendamente irregular. Como, con diversos matices de intensidad, las de los que estaban arriba del escenario. Pero por sus temas (la violencia, la familia, la culpa) , su pasión por el oficio de hacer películas, su sentido del humor y su ambigua relación con el american way, ocupa con todo derecho un lugar al lado de los Cuatro de Hollywood, y con un premio en la mano, aunque probablemente sea el menos agraciado del grupo.

Con Scorsese premiado, desde el último domingo Brian -el de Blow Out, Doble de cuerpo, Los Intocables- pasa a ser mi outcast titular.